12 juin, 2007

Políticos y asociaciones belgas condenan declaraciones en Argelia de senador socialista sobre Sahara occidental

11/06/2007
Varios políticos y asociaciones belgas han condenado las recientes declaraciones anti-marroquíes en Argelia del senador socialista belga, Pierre Galand, quien atacó Marruecos y su iniciativa autonómica para el Sahara.
"En el momento en que Marruecos presenta un proyecto de autonomía ampliada para las provincias del Sur, una iniciativa de paz apoyada por el conjunto de la sociedad civil y política marroquí, saludada y alentada por la casi-totalidad de las naciones democráticas y las Naciones Unidas, el senador Pierre Galan avala implícitamente los llamamientos a la guerra contra Marruecos, lanzados por el jefe del +Polisario+", indica, en un comunicado, la Coordinación de las asociaciones democráticas marroquíes en Bélgica.
Las tomas de posición de Pierre Galand "son contrarias a la resolución adoptada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que subraya los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos en la gestión del dossier del Sahara, los cuales son animados por Bélgica que preside actualmente el Consejo de Seguridad y por una clase política belga preocupada por el interés de la población", añade la Coordinación.
Por otra parte, el presidente del Movimiento reformador internacional, Daniel Ducarme, se preguntó en declaraciones a la segunda cadena de televisión marroquí 2M, sobre las razones de apoyar el planteamiento de los separatistas, y calificó las declaraciones del senador belga en Argelia de "grave error que va en contra de la paz".
Las declaraciones de Galand han sido condenadas por los miembros de su propia formación política, como es el caso de Philippe Moureaux, gran figura del partido socialista belga. Este expresó también su apoyo a la iniciativa autonómica marroquí para el Sahara en el marco de la soberanía marroquí.
El pasado 11 de abril, Marruecos presentó a la ONU su iniciativa de negociación de un estatuto de autonomía para la región del Sahara, que concede a la población de esta región amplias competencias para la gestión de sus asuntos locales en el marco de la soberanía e integridad territorial del Reino.
En su última resolución (1754), el Consejo de Seguridad de la ONU se había congratulado por los esfuerzos "serios y creíbles" de Marruecos en referencia al plan marroquí, y apeló a las partes concernidas a iniciar negociaciones "de buena fe y sin condiciones previas" para lograr "una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable" a este conflicto que opone, desde 1975, Marruecos a los separatistas del +Polisario+, apoyados por Argelia.

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